Cómo Ser Más Ecológico en el Trabajo

Solemos pensar que para ser “eco-friendly” debemos vivir en el campo o alejados de la gran ciudad. Pero eso no es así. En cualquier ámbito tenemos la posibilidad de cuidar el medio ambiente y reducir nuestra huella de carbono.

En la oficina, una tienda o cualquier sitio donde se desarrolle tu empleo puedes ayudar al planeta. ¿Quieres aprender cómo ser más ecológico en el trabajo? Entonces no te pierdas este artículo de Siendo Saludable. Te daremos algunos consejos interesantes y fáciles de poner en práctica. ¡Sólo es una cuestión de actitud!

Tips para ser ecológico en el trabajo

Comienza de a poco y luego añade nuevos hábitos. De esta manera no dejarás de lado tus actividades u obligaciones. Aquí tienes algunas recomendaciones para empezar:

Cambia tu espacio

Esto quiere decir que no hacer falta que modifiques todo en la oficina o lugar de trabajo. Con tu escritorio o cubículo es suficiente para empezar. Tampoco es preciso ser gerente o jefe para iniciar los cambios. Busca de qué manera puedes mejorar tu espacio y hacerlo más ameno con el medio ambiente.

Usa la energía necesaria

Las bombillas del escritorio y del techo son un gasto importante en la factura de electricidad. Se pueden usar LED o bajo consumo pero además tratar de estar en una oficina con grandes ventanales que permita el ingreso del sol. Esto además mejorará el humor de todos los que te rodean. Al terminar la jornada se deben apagar todas las luces de la empresa.

Por otra parte la calefacción y refrigeración de los ambientes comprende una buena parte del gasto en electricidad. Mantener las persianas abiertas durante el día para que ingrese el calor o cerrar un poco en el verano para que no aumente la temperatura es una buena idea.

En muchos lugares colocan termostatos para ajustar la calefacción o el aire acondicionado y evitar el desperdicio de energía. En ambos casos debe estar a una temperatura normal y acorde a las necesidades de todos. Si alguien es muy friolento o caluroso que se abrigue o quite la chaqueta, pero que eso no interfiera en el ambiente general.

Emplea los dispositivos de manera eficiente

¿Tienes un montón de dispositivos cargados pero sólo usas un par de ellos? ¡Entonces desconecta los que no estés utilizando! Por ejemplo la impresora o la fotocopiadora. Por otra parte puedes evitar gastar electricidad con un uso inteligente de tu ordenador. Si tienes la posibilidad de elegir el modelo opta por uno que sea A+ en cuánto a ahorro de energía o una portátil en lugar de una de escritorio.

Pero si ya tienes el equipo “que te ha tocado en suerte” puedes configurar la energía para que se suspenda la pantalla a los 15 minutos de inactividad. Lo mismo para el disco duro. Otra opción es hibernar el PC tras media hora sin usarlo. Reduce el brillo de la pantalla y recuerda apagar el dispositivo cuando termina tu jornada. ¡No te olvides de los periféricos!

No imprimas porque si

Este simple acto tiene muchas ventajas. Por un lado estarás haciendo que la empresa ahorre bastante dinero en tintas y papel, pero sobre todo evitarás la tala indiscriminada de árboles, el uso de electricidad con la impresora y la compra de cartuchos.

Trata de no imprimir a color a menos que sea estrictamente necesario, imprime siempre doble cara, mejor si es en modo borrador (se emplea menos tinta) y recicla los cartuchos de tinta.

En relación al uso del papel, piensa dos veces antes de tomar una hoja nueva sin usar. Para ahorrar el gasto de papel (algo muy habitual en las oficinas) opta por guardar copias de cosas importantes en el ordenador, usar la otra cara de la hoja para apuntes o notas, evita que te envíen catálogos o revistas, suscríbete a las versiones online de todos tus clientes o proveedores, revisa los documentos en línea antes de imprimirlos.

Si no queda otro remedio que usar papel también puedes elegir opciones menos perjudiciales para el planeta: reciclado, sin cloro, de bambú, de cáñamo o de algodón.

Respira aire sano

Los ordenadores, estar en un ambiente con muchas personas más, los perfumes… todo eso contamina el aire. Una buena manera de salir de ese encierro es ir al parque a la hora del almuerzo pero además sería bueno que se usaran productos de limpieza sin tóxicos, mantener la higiene del lugar, abrir las ventanas para que corra aire, no fumar, no usar aerosoles y emplear un purificador.

Decora con plantas naturales

Hay muchas especies que soportan incluso los ambientes más austeros. ¡Incluso que no te acuerdes de regar varios días! Tu escritorio, oficina, cubículo o hasta el piso puede quedar más bonito y natural con un par de plantas alrededor. Si quieres ver en tu trabajo varias macetas y más verde… ¡regala flores a tus compañeros!

Además de ser un gesto de amistad el flujo de oxígeno mejorará, se reducirá la contaminación acústica y ambiental y también la temperatura se equilibrará.

Recicla

Muchas empresas ya han colocado tachos de basura para dividir la basura en orgánicos, papel, plásticos/cartón y vidrios. ¿Qué tal hacer lo mismo en tu trabajo? Pide permiso si es necesario. También puedes colocar un cesto donde arrojar residuos electrónicos y ponerte en contacto con organizaciones que se encarguen de recogerlo para reciclar. Las hojas y cartones pueden servir en escuelas o jardines de infantes.

Al principio será un poco difícil que tus colegas se acostumbren o “acierten” al cubo correcto pero de a poco se convertirá en un hábito. No olvides comentarles cuáles son los beneficios de la separación de residuos en relación al planeta pero también a la salud.

Come saludablemente

Si cada mediodía compras el almuerzo en un restaurante cercano al cabo de un mes… ¡habrás juntado 20 envases plásticos! Por supuesto la mayoría de ellos terminan en la basura. Eso sin contar por supuesto el gasto de dinero que implica comer fuera.

Una excelente manera de ahorrar de tu sueldo y ayudar al planeta, además de alimentarte de manera casera, es llevar tu propia comida. Por ejemplo el domingo puedes preparar el menú de toda la semana y dividir en recipientes reutilizables.

Eso también se puede extender a tus desayunos y meriendas. En lugar de usar los vasos plásticos de la máquina de café opta por llevar tu taza de cerámica y lavarla cuando termines.

Viaja de forma ecológica

El coche, el autobús y el metro son grande fuentes de contaminación ambiental. Para no contribuir a ello puedes elegir ir en bicicleta o incluso andando. Si vives lejos de la oficina puedes descender algunas estaciones antes y caminar. Si quieres usar tu propio vehículo organízate con colegas para viajar juntos. Al llegar usa las escaleras en lugar del elevador.

Si tienes la posibilidad elige el teletrabajo. Está comprobado que aquellos que cumplen sus obligaciones desde casa gastan menos dinero y por supuesto no hacen tanto mal al medio ambiente. Siempre y cuando sigas siendo eficiente y tu puesto lo permita, puedes proponerlo en la empresa.

¡Hay mucho por hacer para que el ambiente de trabajo sea más ecológico! Empieza con un pequeño paso a la vez y verás que ya estás haciendo la diferencia.

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