Semilleros en Recipientes

Varias son las razones por las cuáles usar semilleros para la huerta. Por ejemplo para adelantar la siembra de los cultivos, evitar que los factores climáticos incidan en el desarrollo de las hortalizas o bien para que las plantas crezcan más fuertes desde semilla.

Si bien se pueden comprar los semilleros en los viveros y tiendas de jardinería muchos también optan por reciclar recipientes pequeños como de yogur o envases vacíos de conserva. ¡Hasta están los que emplean cáscaras de huevo o botellas cortadas!

¿Cuáles son las ventajas de los semilleros?

Una vez que conozcas los beneficios de usar semilleros comenzarás a emplearlos en tu huerta. Algunas de las ventajas de este tipo de recipientes son:

• Lograr que las semillas sean más eficaces (no perder tantas por las aves, el viento, la lluvia, etc).
• Controlar la exposición a la temperatura, humedad, sol, agua, etc.
• Reducir el tiempo de cultivo en tierra y aprovechar ese espacio para las especies que lo requieran.
• Evitar que las pequeñas plántulas o plantines compitan con las malas hierbas o por “hacerse un lugar”.
• Permitir que las plantas sean más fuertes al momento de trasplantar a tierra.

Las especies que se pueden plantar en semilleros son:

• Apio
• Berenjena
• Cebolla
• Col
• Lechuga
• Pepino
• Pimiento
• Puerro
• Sandía
• Tomate

¿Cómo es el procedimiento para plantar en semilleros?

Puedes colocar las semillas en los recipientes en cualquier momento del año siempre teniendo en cuenta la especie y el clima. Si por ejemplo tenemos un invernadero no tendremos que preocuparnos tanto de la temperatura ambiente.

Los contenedores son variados. Además de los que se compran tipo bandeja (para 50 o 100 semillas) puedes usar envases de yogur, bandejas planas de plástico, bandejas de cartón para huevos, bandejas de plástico para huevos, etc. Los pasos a seguir para plantar en semilleros son:

1. Rellena el recipiente con una base de compost.
2. Haz un orificio con el dedo en cada compartimento (más o menos grande según la semilla).
3. Coloca una semilla por agujero si es de tamaño grande o 2/3 si es pequeña.
4. Cubre con una fina capa de tierra negra abonada.
5. Riega usando la regadera o un pulverizador para que no se encharque.
6. Puedes tapar con un plástico transparente para hacer una “mini invernadero”.
7. Mueve los semilleros para que tengan luz solar y cúbrelos por las noches.
8. Retira el plástico cuando empiezan a salir las primeras hojas de los tallos.
9. Trasplanta a tierra una vez que cada plantín tenga 4 hojitas (se las conoce como hojas de leche), quitando completamente el “pan” de tierra… ¡ten mucho cuidado con las raíces!

Puedes usar los recipientes cada temporada con diferentes especies de semillas. No olvides que si tienes espacio para plantar puedes hacer siembra escalonada, es decir, armar nuevos semilleros cada dos semanas… así nunca te faltará verdura fresca y lista para disfrutar. ¡Es una excelente herramienta para tu huerta!

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