Cómo Cultivar Berenjenas

De color oscuro y riquísimo sabor, esta verdura originaria del sudeste asiático y usada desde hace más de 4 mil años tiene un gran valor energético y nutritivo. Aporta potasio (el mineral más abundante), calcio, fósforo, hierro y muchas vitaminas. Además es un 92% agua y casi no tiene calorías.

Es bueno saber que la berenjena se debe consumir cocida ya que cruda es tóxica. Está presente en muchos platillos típicos de varios países como por ejemplo la Mousaka en Grecia, el Babaganoush en los países árabes o la Caponata en Italia. ¿Te gustaría saber cómo cultivar berenjenas? Entonces no dudes en seguir leyendo este artículo.

El cultivo de la berenjena: Elementos indispensables

Para cultivar y cosechar berenjenas en la huerta de tu casa es necesario tener:

1.Semillas: Si bien para colocarlas en tierra es preciso que se haya formado el almácigo en una maceta todo comienza con las semillas que se extraen de las berenjenas maduras. Se colocan en un macetero de al menos 25 cm de profundidad.

2.Tierra: Requiere de una mezcla de abono o compost que alcance un pH de 6. Los suelos para cultivar berenjenas más aptos han de ser húmedos y profundos.

3.Sol: Para poder crecer la planta necesita bastante sol (como mínimo 10 horas diarias). Si el suelo se mantiene húmedo soporta temperaturas elevadas pero no resiste las heladas o el frío (hasta 10°C es aceptable).

4.Riego: En la época en que crecen los frutos las berenjenas necesitan bastante agua. En el caso de cultivarlas en maceteros es primordial que tengan un buen drenaje para evitar que el agua se acumule en las raíces y las pudra.

Cultivando berenjenas: Paso a Paso

De la teoría a la práctica en unos instantes… recuerda que la mejor época para sembrar es a fines del invierno. Coloca las semillas en las macetas o maceteros, riega cuidadosamente y no permitas que el agua se encharque. Espera 3 meses para que el almácigo se desarrolle correctamente (habrá alcanzado unos 8 cm de altura)

Luego es momento de pasar a la tierra. Deja 60 cm entre cada planta y 80 cm entre las líneas de plantación. Elige un sitio soleado y haz los pozos con una pala o asada. Cuando la planta llegue a los 60 cm de alto emplea guías o tutores para evitar que los frutos toquen el suelo y que la planta no se quiebre por el peso. Las hojas interiores e inferiores se deben quitar para que la planta tenga una mayor ventilación y el fruto más iluminación.

Dos meses después del trasplante ya deberías poder cosechar las berenjenas. Fijate en el color (morado bien oscuro), en la consistencia (han de estar duras) y en el tamaño (de mediano a grande).

Como “compañeras” de la berenjena en la huerta y en tus comidas no dudes en leer las guías para cultivar lechugas, cebollas, zanahorias, patatas y tomates.

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