Remedios Caseros con Bicarbonato de Sodio

Podría decirse que se trata de uno de los elementos que no puede faltar en tu casa. Su versatilidad es tal que necesitaremos más de un artículo para detallar todos sus usos y aplicaciones (algo que vamos a hacer, sin dudas). El bicarbonato de sodio es un oro blanco que se consigue en varias tiendas, es asequible y nos sirve para infinidad de cosas.

Datos Interesantes sobre el Bicarbonato de Sodio

El bicarbonato de sodio, también conocido como carbonato, se usa para la limpieza y para ciertas recetas de cocina. Sin embargo, puede ser aprovechado para aliviar o curar ciertas dolencias. Tenemos a disposición un medicamento natural, barato y “multifunción” y no podemos dejarlo de lado.

En su forma natural, lleva el nombre de nahcolite, parte del natrón mineral natural. Ha sido usado desde tiempos muy antiguos. Se sabe, por ejemplo, que en el Antiguo Egipto se utilizaba para hacer jabón por sus maravillosas propiedades de limpieza.

En 1846 los Dres. Austin Iglesia y Dwight Jhon empezaron a producir y a vender un compuesto que hoy conocemos como bicarbonato de sodio. En 1860, fue incluido en los libros de recetas de cocina y para 1930 se publicitó como un agente médico comprobado.

Muchas personas conocen, gracias a la empresa Arm & Hammer que el bicarbonato tiene propiedades increíbles para el uso doméstico y para cocinar, pero no todos ellos conocen los poderes de este elemento para la salud.

¿Para qué sirve el Bicarbonato?

En esta ocasión nos referiremos a los usos medicinales del bicarbonato, uno más interesante que el otro, sin dudas.

Previene gripes y resfriados: Los estudios indican que consumir bicarbonato ayuda a mantener el pH de la sangre en óptimas condiciones. Las personas que se alcalinizan con este compuesto tienen menos posibilidades de contraer enfermedades virales o bien el cuadro es mucho más leve. Si estás resfriado, sigue este plan de tres días con bicarbonato:

• 1° día: Seis dosis de media cucharadita de bicarbonato por vaso de agua. Con intervalos de dos horas entre cada toma.


• 2° día: Cuatro dosis de media cucharadita de bicarbonato por vaso de agua fría con intervalos de dos horas.


• 3° día: Dos dosis con la misma proporción, la primera a la mañana y la segunda a la tarde.


• Días siguientes: Una dosis por la mañana, en lo posible en ayunas.

Alivia los dolores provocados por las úlceras: Si sufres de úlceras estomacales, no tendremos que decirte lo dolorosas que son. Para contrarrestar los síntomas, puedes usar bicarbonato para neutralizar los ácidos del estómago. Coloca dos cucharaditas en un vaso con agua y bebe antes del desayuno.

Quitar las astillas de la piel: Si has trabajado con madera o manipulado leña y se te han clavado astillas en los dedos o manos, mezcla una cucharada de bicarbonato en un vaso pequeño con agua. Sumerge el área afectada, dos veces al día, repite hasta que las astillas se hayan desprendido de la piel por completo.

Alivia las quemaduras producidas por el sol: Si has cometido el error de ir a la playa o caminar por la ciudad al mediodía y sin factor de protección o bien si tienes la piel muy sensible y los rayos UV son tu peor pesadilla, puedes llevar a cabo este remedio casero. Llena la tina con agua tibia y luego añade media taza de bicarbonato de sodio. Sumérgete para disfrutar de un alivio instantáneo. Al salir, no seques con toalla, deja que el agua se evapore. Si te has quemado con el horno, por ejemplo, puedes hacer una pasta con bicarbonato y un poco de agua, colocando como compresa en el área afectada.

Evitar el mal olor de las axilas: Si no quieres usar desodorantes industriales y tampoco que todo el mundo se aleje de tu lado por lo que transpiras, puedes colocar bajo los brazos una pizca de bicarbonato mezclado con agua.

Eliminar la placa de los dientes: Para tener una boca más saludable, unas encías más fuertes y unos dientes más brillantes, cambia el dentífrico habitual por bicarbonato de sodio. Una mezcla ideal está hecha con seis partes de este ingrediente y una de sal de mar. Mezcla bien y coloca en un recipiente de vidrio con tapa. Luego vierte un poco en el cepillo dental mojado y cepilla como de costumbre. Si tienes las encías muy sensibles, al principio sentirás escozor o hasta sangrado, pero esto irá disminuyendo con el paso de los días. Puedes alternar su uso con el dentífrico tradicional.

Aliviar la comezón: Tanto en los casos de picaduras de insectos como de “culebrilla” (herpes zoster), el bicarbonato de sodio es perfecto para reducir el picor y evitar que nos rasquemos y lastimemos la piel, dejando marcas por mucho tiempo. Realiza una pasta con bicarbonato y muy poca agua. Aplica en el área afectada, deja durante varios minutos y luego enjuaga con agua fría o templada. Otra opción es frotar directamente el polvillo seco sobre la piel, para las erupciones cutáneas o el contacto con hiedra venenosa.

Aliviar el cansancio de los pies: Si llegas a tu casa extenuado después de un largo día de trabajo, no dudes en aprovechar esta receta casera para remojar tus pies y descansar un poco. En un recipiente con agua caliente coloca tres cucharadas de bicarbonato. Introduce los pies y déjalos allí hasta que el agua se enfríe. Aprovecha mientras tanto para leer un buen libro o revista, hablar con tu familia o hasta dormir hasta la hora de preparar la cena.

Exfoliar la piel: Atención, porque esta receta no es aconsejable en las personas que tienen la dermis muy sensible porque puede irritar bastante. Realiza una pasta con tres partes de bicarbonato con una parte de agua. Coloca en la zona que quieres exfoliar con masajes en círculo. Es una buena idea para quitar las manchas de las axilas, los codos o las rodillas, por ejemplo o para tener un rostro de porcelana.

Más propiedades del bicarbonato de sodio

¿Todavía quieres conocer más de nuestro gran aliado el bicarbonato de sodio? Si, porque aún quedan muchas propiedades por detallar. Algunas de ellas (siempre enfocándonos en la salud) son:

• Es anticancerígeno: al alcaliniza el pH del cuerpo evita que los radicales libres hagan de las suyas en nuestro interior. El bicarbonato evita la invasión de células tumorales y metástasis.


• Es antiácido: Si sufres de acidez estomacal o reflujo gastro esofágico, el bicarbonato de sodio puede ayudarte a neutralizar el ácido, con un alivio inmediato.


• Es depurativo: Ayuda a eliminar las toxinas y residuos del hígado, un órgano vital para el desarrollo normal de todas nuestras funciones.


• Es regulador del colesterol: Bebe agua con bicarbonato de sodio ayuda a reducir los niveles de colesterol “malo” LDL y eso trae como consecuencia una mejor salud cardiovascular.

En la próxima entrega, tendrás todavía más herramientas para darte cuenta de por qué decimos que el bicarbonato es un aliado que no puede faltar en tu casa. ¡No te lo pierdas!

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